Veles: El Guardián Eslavo de la Tierra, las Aguas y el Inframundo

Veles: El Guardián Eslavo de la Tierra, las Aguas y el Inframundo

En el rico tapiz de la mitología eslava, Veles emerge como una de las deidades más complejas y multifacéticas, custodiando los reinos de la tierra, las aguas y el inframundo. A menudo representado como un dragón, una serpiente o un toro, Veles personifica la fuerza vital de la naturaleza y su eterno ciclo de vida, muerte y renacimiento.

Orígenes y Dominios:
Veles, conocido también bajo varios nombres a lo largo de las regiones eslavas, es una figura antigua, cuyos orígenes se pierden en la prehistoria. Es el dios de numerosos aspectos de la vida y el mundo natural, incluyendo la tierra, la ganadería, la magia, la música y el inframundo. Su dominio sobre el agua lo asocia también con el comercio y la riqueza, siendo protector de los mercaderes.

Representación Mítica:
Veles se representa de varias maneras, reflejando su naturaleza polimórfica y sus múltiples atribuciones. Como dragón o serpiente, simboliza el agua y el inframundo, serpenteando entre los ríos del destino y el conocimiento oculto. Como toro, representa la fuerza, la fertilidad y la protección del ganado. Estas formas, ya sea ferales o divinas, resaltan su conexión con los mundos natural y sobrenatural.

Veles en el Panteón Eslavo:
Veles es a menudo visto en oposición o en una compleja relación con el dios Perun, la deidad del trueno y el orden cósmico. Su rivalidad representa la lucha eterna entre el orden y el caos, la tierra y el cielo, lo conocido y lo misterioso. Sin embargo, Veles no es un simple antagonista; es un guardián de la sabiduría oculta y un protector de aquellos que viajan por caminos inciertos.

Simbolismo y Culto:
Veles es un símbolo de la naturaleza incontrolable y misteriosa. En la antigua tradición eslava, su culto estaba asociado con rituales de fertilidad, la práctica de la magia y la veneración de los ancestros. Las estatuas y los templos dedicados a Veles a menudo se encontraban cerca de los árboles, en las colinas o junto a los ríos, marcando los lugares donde el velo entre los mundos era más delgado.

Veles en la Cultura Moderna:
La figura de Veles ha experimentado un resurgimiento en el interés contemporáneo por la mitología eslava. Es un personaje frecuente en la literatura, el arte y la música, donde se le representa como un símbolo de la sabiduría antigua, la resistencia y la conexión profunda con las fuerzas naturales y espirituales.

Conclusión:
Veles representa la intrincada relación entre el hombre, la naturaleza y el cosmos en la cosmovisión eslava. A través de sus múltiples formas y dominios, nos habla de un mundo donde todo está interconectado, donde cada ciclo de muerte da paso a la renovación y donde la sabiduría reside en el respeto por todas las formas de vida. En la modernidad, Veles sigue siendo una figura cautivadora, recordándonos la importancia de nuestras raíces y la perpetua danza de la creación y la destrucción que rige el universo.

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